El presente de Descanso deja mucho para analizar, que el ataque, la defensa, el arquero, los réferis, rivales, etcétera. El equipo se hunde en un pozo depresivo y a la hora de buscar responsables hay alguien que se escabulló lo más bien. Forma parte del riñón de del equipo desde sus inicios, y se esconde bajo las narices de la comisión directiva gozando a la vez de un sueldo muy jugoso (?). Por si todavía no adivinaron a quién se refiere esta nota se los dejamos bien clarito: nos referimos al Sr. Valentín “el Gansha” Zubieta, el DT, Mister, Head Coach comprador de bondiolas que tras su (aparente) retiro tomó la dirección de un equipo que venía invicto (así fue) y lo estancó en una meseta por un largo tiempo hasta que hace pocos días encontró su acantilado y no hizo más que empujar a sus dirigidos al borde del mismo. Este sujeto al parecer posee severos trastornos de bipolaridad a la vez que potencia las actividades nocturnas de los “futbolistas”.
Hay quienes digan que el pobre Gansha es víctima de una persecución mediática promulgada por la directiva con el fin de usarlo como chivo expiatorio y dejar la reputación de los aburguesados dirigentes intacta. Sin embargo, desde la barra y los periodistas partidarios han llegado voces de acuerdo con este relato. Se ha escuchado que gracias a un simple comentario de un reportero anónimo quien se hace llamar por Señor X, los seguidores del club han podido encontrar una tendencia que en cualquier otro club hubiese sido letal para cualquier técnico.
Por el momento, el técnico se mantiene atrincherado en su bunker preparando el próximo partido (Nffff), con lo cual ningún medio ha podido comunicarse con él. Ha trascendido que la directiva deslizó un ultimátum por debajo de su puerta que depende de los resultados del sábado. Zubieta está en la cuerda floja… y Caruso, sin club, acecha…
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