EL ETERNO JUVENIL

Aprovechando el parate del torneo debido a la convocatoria de varios de nuestros jugadores a la selección (?), Descanso descansa y prepara una de sus pocas salidas fuertes de viernes. Mientras tanto, hay uno de todos ellos que merece que le dediquemos al menos un post mientras no haya demasiada actividad.

Hay quienes dicen que, en su momento, pintaba para crack. Allá por el 2007, durante los inicios del club en el cual jugaba el actual DT (hoy gloria indiscutida) llegó un flacucho para jugar de nueve ante la ausencia de varios players. Dos patas largas, blancas y flacas como grisines prometían velocidad, y por eso se lo mandó a jugar de extremo izquierdo.

Mucho no se recuerda de él en ese partido. La pelota pocas veces pasó por sus pies y sus piques fueron contadas veces vistos por sus compañeros. Los diarios fueron muy duros con él, hasta el punto que por un largo tiempo no volvió a pisar el verde césped. El DT había hecho lo imposible: habían quemado al Igor Massa.

A partir de ese momento los hinchas de Descanso lo tuvieron entre ceja y ceja, culpándolo por los fracasos del equipo aunque ni siquiera juegue. Pronto, se lo dejó de ver en los entrenamientos y empezó a frecuentar boliches de mala muerte. El lado oscuro se lo había llevado por una camino turbulento lleno de infortunios que lo encontraron más de una vez en la comisaría.

Años más tarde, Descanso ya era una realidad. La Naranja salía a la cancha todos los sábados con un plantel bastante numeroso y varios debutantes. Los partidos pasaban y pasaban pero no había rastros de aquel lungo jugador. Fue entonces cuando gracias a la lesión de algunos jugadores del equipo se armó “El Agite de Bulón”. EADB funciona actualmente como barra y semillero a la vez. Es un tanto extraño pero la forma en la que el equipo consigue nuevos jugadores es bajándolos del tablón. Con el correr de los partidos se vieron los debut del Mauro, la Tutela, el Príncipe y el Chileno, entre otros. El equipo estaba a full, pero algo faltaba…

Fue entonces cuando ese mítico eterno juvenil sacó numerito y esperó sentado su turno en el tablón. Partido a partido ocupa ese lugar esperando que falte uno para poder dar el salto que lo devuelva a primera. Ese salto que le permita dejar atrás tantos años de ostracismo y borrar el tílde de jugador fracasado con el que carga. Este apertura ya lo tiene con los botines puestos cada vez más cerca de la línea de cal. ¿Será este el torneo en el que el Igor se toma revancha? Veremos…